¿PUEDE LA FUENTE DELA JUVENTUD SER
La historia está llena con relatos de gente buscando la proverbial
fuente de la juventud o, en los tiempos podernos, la píldora mágica. La mayoría
de la gente en los Estados Unidos conoce acerca de las famosas investigaciones
de Ponce de León que terminaron en un descubrimiento en Florida, pero no son la
fuente de la juventud. Eso fue hasta que diferente clase de exploradores empezaron haciendo descubrimientos
encaminados al aumentar el rango de vida, y encontraron que no tienes que
viajar alrededor del mundo como Ponce de León y otros buscadores de la longevidad
como lo hicieron en el pasado. Una parte importante del secreto de la
longevidad puede ser descubierto en tu propia cocina, con mucha de la comida
que consumes cada día. Sí, las investigaciones más convincentes han concluido
que uno de los secretos de la longevidad se basa en la forma en cómo te
alimentas.
Por muchas décadas, estudios fueron efectuados en ratas.
Chimpancés y otros animales y hasta microbios (bacterias) con el único
propósito de averiguar cómo hacerles vivir más. Algunos de los primero
titulares encontraron su camino en las revistas médicas y en la prensa general
promocionado como estos primeros descubrimientos resultaron en la ampliación de
la vida de la levadura, los gusanos y las ratas. Sin embargo, el secreto de la
longevidad de estos investigadores descubrieron que no estaba una poción mágica
transmitida desde el jardín del Edén o un nuevo medicamento. El
secreto de la longevidad sobre la base de estos primeros estudios se relacionan
con comer menos alimentos.
Investigaciones recientes dan crédito a un pionero
estudio reportado en un fascículo de la Journal of Nutrition en 1935 por el Dr. C.M McCay
y el Dr. L.A. Maynard acerca de la restricción de calorías y el incremento de
la vida en animales, entonces esto era en realidad una idea revolucionaria que
cautivó la imaginación de personas de todo el mundo. Ellos razonaron que si la
duración de la vida de los animales podía incrementarse, lo mismo podía suceder
para los seres humanos con la ayuda de la ciencia.
El factor de
estrés oxidativo
Investigaciones por todas partes iniciaron experimentos
usando toda clase de animales: desde microbios unicelulares hasta un poco más
complicados gusanos invertebrados, desde moscas de la fruta hasta peces, y
desde ratas hasta monos, con el tiempo lo hicieron con humanos. Una vez la idea
general estaba basada en que la restricción de las calorías podría incrementar
la duración de la vida, el siguiente paso
para los investigadores era determinar por que. ¿Qué hacía que la restricción
de calorías aumentara la vida en animales?. Desde estas décadas de
investigaciones, algunos puntos de vista fueron descubiertos acerca del
ralentizamiento de la vejez. Reduciendo enfermedades, e incrementando la duración
de la vida. Estas primeras investigaciones también determinaron que los
animales también necesitan un correcto balance de reducción de calorías con la ingesta de nutrientes esenciales para
experimentar una longevidad óptima.
Uno de los factores de la longevidad revelaron desde los
estudios en animales fue la reducción en lo que los científicos llaman stress
oxidativo. El estrés oxidativo es parte de la vida. Esto ocurre todo el tiempo.
Una gran fuente de stress oxidativo viene de los compuestos liberados cuando
digerimos el alimento. Lo que se deduce que cuando menos calorías se consumen,
el estrés oxidativo interno se reduce automáticamente
Pero para los seres humanos, la reducción de nuestra
forma natural de estrés oxidativo interno es parte del desafío. En estos
tiempos de estrés oxidativo adicional también proviene de los productos químicos fuera de nuestros
cuerpos, así que tenemos mucho estrés oxidativo en nuestras vidas, y nuestros
sistemas de protección están abrumados. Esto llevó a los científicos a la idea
de que la ingestión de grandes cantidades de nutrientes, con lo que se denomina
actividad "antioxidante" sería una manera de ayudar a reducir
el estrés oxidativo. Los estudios más recientes en efecto, apoyan este
argumento, al igual que nuestros propios resultados del trabajo directo con la
gente, que vamos a elaborar en el Capítulo 6.
Más beneficios de longevidad Revelados
En tanto esta investigación se desarrolla, los
científicos comenzaron a comprender mejor cómo la biología básica común a todos
los animales se relaciona con la longevidad y la salud. Estas funciones vitales
con el tiempo se convirtió en referencia a como biomarcadores. Algunos de los
biomarcadores asociados con la restricción de calorías y mayor vida útil en los
animales incluyen: la reducción de la temperatura corporal, reduce la
producción de energía, mejora la sensibilidad y producción a la insulina, menos
grasa corporal, presión arterial, la reducción en el endurecimiento de las arterias,
menos obstrucción de las arterias, decrece la
inflamación y el balance favorable de las hormonas incluyendo el DHEA
(dehidroepiandrosterone), el cual es considerado ser control master y promotor de la hormona de
la juventud producida en algunos animales y seres humanos. Dado que la
investigación avanzaba, se descubrió que estos biomarcadores pueden ser
influenciados por el estilo de vida, y que las mejoras
importantes en la salud se puede experimentar al tomar los suplementos
adecuados. Esto será revisado en el Capítulo 6.
Control de la expresión Genética
Los estudios en
animales más reciente informan de cómo la restricción calórica puede afectar la
expresión génica. Los genes se almacenan en cada célula en hebras de ADN (ácido
desoxirribonucleico), llamadas cromosomas.
Veinticuatro horas al día, los genes en los cromosomas se
enciende y se apaga para que las sustancias que necesita para funcionar y
mantenerse con vida. Cuando tu expresión genética está funcionando
correctamente, tú estás saludable. Cuando ésta no está funcionando bien, tu
salud está severamente afectada, su vida útil se reduce, y las enfermedades del
envejecimiento empiezan a aparecer.
Aunque vamos a discutir esta información con más detalle
en los capítulos siguientes, es importante tener en cuenta desde el principio
de que el envejecimiento se asocia con
cambios en la expresión génica a través del cuerpo. Estos cambios están
asociados con la disminución cerebral, del corazón, sistema digestivo y las
funciones musculares que están relacionadas cuando se acerca la vejez.
La buena noticia es que en estudios sobre la vida de los
animales donde se muestra la restricción de calorías parece ser capaz de frenar
el declive normal de la función del cuerpo. Este se cree que ocurre al aumentar
la síntesis de proteínas y por la disminución de daños a las células y las
moléculas en el cuerpo, incluyendo, la más importante, el DNA. Esto significa
menor daño de las células y tejidos que conducen a un mejor crecimiento de las
células, la función y la reparación - las cosas que necesitamos para vivir una
vida larga y saludable.
INVESTIGACION DE LA
VIDA HUMANA
Mientras la investigación en no humanos sobre la
restricción de calorías estaba en marcha, un grupo especial de investigadores
llamados los epidemiólogos empezaron a buscar en todo el mundo grupos de
personas que han estado practicando la restricción de calorías como una forma
natural de la vida. Los investigadores encontraron lo que estaban buscando en
la década de 1990 en una pequeña isla al sur de la isla principal de Japón. Las
personas que viven en Okinawa eran más saludables y un mayor número llegaba a
los 100 en comparación con las poblaciones estudiadas en otros lugares. Por
ejemplo, en comparación con los estadounidenses, en Okinawa los ancianos:
- ¿Tienen el 75 por ciento más probabilidades de mantener
la capacidad cognitiva
- Tienen 80 por ciento menos cáncer de próstata y mama
- Obtienen un 50 por ciento menos cáncer de colon y ovario
- Disponen de un 50 por ciento menos fracturas de cadera
- Disponen de un 80 por ciento menos ataques al corazón
- Tienen una esperanza de vida media de ochenta y siete años, frente a un estadounidense cuya esperanza de vida masculina promedio es de setenta y ocho años
- Tienen el mayor número de personas centenarias
- Tienen 80 por ciento menos cáncer de próstata y mama
- Obtienen un 50 por ciento menos cáncer de colon y ovario
- Disponen de un 50 por ciento menos fracturas de cadera
- Disponen de un 80 por ciento menos ataques al corazón
- Tienen una esperanza de vida media de ochenta y siete años, frente a un estadounidense cuya esperanza de vida masculina promedio es de setenta y ocho años
- Tienen el mayor número de personas centenarias
Qué permite a
más personas en Okinawa vivir más tiempo y más saludable?
Aunque la genética es siempre un factor en la salud, los
investigadores determinaron que la dieta de Okinawa y el estilo de vida juegan
el papel más importante en este fenómeno espectacular de envejecimiento
saludable. No solamente en la típica dieta de Okinawa baja en calorías en
comparación con la dieta estadounidense promedio, es más saludable. La dieta de
Okinawa es baja en grasa animal, y los alimentos chatarra, mientras que es alta
en frutas y verduras, fibra, ácidos grasos omega-3 ácidos grasos, alimentos
integrales, y bioflavonoides. De hecho, los biomarcadores de longevidad y la
salud en Okinawa fueron similares a los biomarcadores en estudios con animales
sometidos a restricción calórica.
Por primera vez, hubo evidencia de una correlación entre
la visión de la restricción calórica que abarcan la vida en los animales y
mecanismos similares de vida en los seres humanos. Pero se necesitan más
investigaciones para descubrir el secreto más codiciado del envejecimiento
biológico y cómo aumentar la esperanza de vida en los seres humanos.
Más
investigaciones prometedoras desde el
Este
La investigación adicional realizada en Japón reforzó la
asociación entre el consumo de energía y vida. Cuando los investigadores dieron
seguimiento a un grupo de 1.915 hombres sanos durante treinta y seis años que
fueron los no fumadores de entre cuarenta y cinco sesenta y ocho años,
encontraron lo que estaban esperando. En 2004, el equipo de investigadores
dirigido por el doctor Bradley Willcox observó una tendencia hacia una mayor
vida útil en el grupo de hombres que ingieren alrededor de 15 por ciento de
calorías menos por día por debajo de la ingesta media. Este grupo que redujo el
consumo de calorías, también ha reducido la incidencia de las enfermedades.
Hasta el momento, sobre la base de la investigación
epidemiológica, parecía que la longevidad y la prevención de enfermedades se
benefician de la restricción calórica, observado en otras especies animales
también puede ser cierto para las personas. Pero para estar más seguros, una
prueba más se necesitaba.
Sorprendentemente, otra prueba se produjo casi por accidente, de un proyecto de
investigación del ecosistema denominado Biosfera 2.
Biosfera 2
ofrece más evidencia de la longevidad.
Recuerda Biosfera 2? En ese experimento en la década de
1990 personas fueron confinadas durante dos años en un ecosistema cerrado, pero
autosuficiente. Los habitantes principalmente comieron un alimento de alta
densidad, complementados con vitaminas dieta vegetariana y baja en calorías. La
intención original era que los habitantes al comer su dieta rica en nutrientes
a un ritmo de consumo igual a las calorías diarias que se gasta-justo lo que
necesitaban para mantener el peso y las actividades diarias.
Sin embargo. La producción de alimentos comenzó a
retrasarse durante el experimento, y durante varios meses los habitantes
tuvieron que mantenerse en una dieta baja en calorías entre 1700 a 2100 calorías por
día.
Este nivel de ingesta diaria de calorías por una dieta de
restricción calórica en el que el consumo de calorías fue menor que las
calorías que normalmente se utilizan cada día. Inesperadamente, el experimento
Biosfera 2 resultó ser el primer experimento en seres humanos de restricción
calórica experimentado en casi dos años.
Los habitantes del Biosfera 2 fueron examinados
rutinariamente por profesionales de la medicina, por lo que este fue un buen
conjunto de datos sobre el estado de su salud. Los investigadores fueron
capaces de analizar los datos para determinar los efectos de la restricción
calórica. ¿Logró la restricción calórica prolongada de la Biosfera 2 resultados en
humanos similares a los cambios en los biomarcadores de longevidad observada en
estudios en animales? Así fue.
En promedio, los habitantes de la Biosfera 2 redujeron la
grasa corporal, peso, metabolismo basal (el número de calorías quemadas en
reposo), y la temperatura corporal, y la disminución de niveles de insulina, el
azúcar en sangre, colesterol, triglicéridos y presión arterial. Después de
revisar y evaluar los datos de salud, los investigadores concluyeron que la
experiencia de Biosfera 2 de restricción calórica no fue perjudicial para la
salud. De hecho, mejoraron la salud dadas las medidas positivas en los
biomarcadores de la salud y la longevidad.
Más pruebas de
las investigaciones actuales sobre los seres humanos
Mientras este libro se estaba escribiendo en 2006, un
importante estudio de investigación había aportado evidencias adicionales para
el modelo de la vida de restricción calórica. Esta investigación fue financiada
por los Institutos Nacionales de Salud y dirigido por un investigador líder en
el campo, el Dr. Leonie Heilbronn . El equipo de investigadores trataron de
determinar cuál es el efecto de seguir una dieta baja en calorías durante seis
meses fue de un grupo de cuarenta y ocho hombres y mujeres sanos, pero
sedentarios.
Dr. Heilbronn y sus colaboradores dividieron a los
hombres y mujeres en cuatro grupos, cada uno siguiendo un programa de dieta
diferente. El grupo de control siguieron una dieta de mantenimiento de peso.
Los otros grupos comieron dietas baja en calorías. Por ejemplo, un grupo
consumió una dieta que se restringió en un 25 por ciento. Otro grupo consumió
una dieta muy baja en calorías durante ocho semanas, seguido de un 15 por
ciento de la dieta reducida en calorías hasta el final del estudio. El grupo
restante siguió una reducción de 15 por ciento de calorías redujo el peso
corporal y la grasa corporal, disminución de los niveles de insulina y la
temperatura corporal, y menos fragmentación del ADN, lo que significa menos
daño en el ADN. Esto significa que los investigadores encontraron cambios
vistos a largo plazo sobre la
restricción de calorías, en otros mamíferos.
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